Tras el parentésis de los temidos examenes de junio y de las merecidas vacaciones post-universidad, devilshopper ha vuelto. Temblad todas aquellas a las que el mundo de la moda no les interesa y creen que pueden pasar sin él, porque aquí estoy dispuesta a seguir contandoos las últimas tendencias de lo que todavía nos queda de verano, y por supuesto aquellas que vendrán para el próximo otoño invierno. Y es que cómo ya he comentado en anteriores ocasiones, hay que saber estar perfecta en cualquier situación.
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Pero este primer post tras el paréntesis que he comentado antes no es para torturar ni criticar a nadie, eso lo dejaremos para futuros artículos. Hoy vamos a hablar de una tinerfeña, Cristina Ortiz, que ha conseguido a llegar a lo más alto en el mundo de la moda.
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Es una mujer moderna, cosmopolita. Ha vivido entre Estados Unidos, Francia, España e Italia, su nuevo hogar. Puede presumir en su curriculum profesional de haber circulado entre los mejores Head-hunters de la moda como Alessandra Facchinetti de Valentino o Frida Gianni de Gucci. Y sin embargo de momento es una gran desconocida para el gran público.
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Muchas no la conocéis todavía, pero os aseguro que pronto todas hablaremos de Cristina Ortiz, y es que es la nueva diseñadora de la firma italiana Salvatore Ferragamo en sustitución de Graeme Black, el hasta ahora director creativo de la marca.
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Cristina Ortiz, hija de un empresario del mundo de los muebles y una decoradora, se formó en la prestigiosa École de la Chambre Syndicale de la Haute Couture de París, pese a que sus primeras aspiraciones en el mundo profesional pasaron por emular al genial Jacques Cousteu. Sin embargo mientras diseñaba bikinis para sus barbies descubrió que su verdadera pasión era el mundo de la moda.
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Puede presumir de haber trabajado junto a una de las más grandes creadoras de tendencias, Miuccia Prada, aunque con los diseños que creo entre 1994 y 1997 fue ella quien dio luz a grandes hits de esta marca. Es por eso por lo que en muchos se comenta que la propia Miuccia Prada llegó a sentirse incomoda teniendo al lado a la creadora española.
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Sus diseños van dirigidos a mujeres elegantes, sofisticadas. Mujeres que disfrutan vistiendo prendas de gran calidad y a las que les encanta sentirse sofisticadas mientras van cómodamente arregladas, y es que se dirige a todas aquellas mujeres, casadas, con hijos… que necesitan estar cómodas y perfectas de la noche a la mañana. Es decir mujeres de la calle, que no necesitan ir ostentosas u horteras para querer demostrar el estilo que tienen
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Muchas no la conocéis todavía, pero os aseguro que pronto todas hablaremos de Cristina Ortiz, y es que es la nueva diseñadora de la firma italiana Salvatore Ferragamo en sustitución de Graeme Black, el hasta ahora director creativo de la marca.
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Cristina Ortiz, hija de un empresario del mundo de los muebles y una decoradora, se formó en la prestigiosa École de la Chambre Syndicale de la Haute Couture de París, pese a que sus primeras aspiraciones en el mundo profesional pasaron por emular al genial Jacques Cousteu. Sin embargo mientras diseñaba bikinis para sus barbies descubrió que su verdadera pasión era el mundo de la moda.
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Puede presumir de haber trabajado junto a una de las más grandes creadoras de tendencias, Miuccia Prada, aunque con los diseños que creo entre 1994 y 1997 fue ella quien dio luz a grandes hits de esta marca. Es por eso por lo que en muchos se comenta que la propia Miuccia Prada llegó a sentirse incomoda teniendo al lado a la creadora española.
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Sus diseños van dirigidos a mujeres elegantes, sofisticadas. Mujeres que disfrutan vistiendo prendas de gran calidad y a las que les encanta sentirse sofisticadas mientras van cómodamente arregladas, y es que se dirige a todas aquellas mujeres, casadas, con hijos… que necesitan estar cómodas y perfectas de la noche a la mañana. Es decir mujeres de la calle, que no necesitan ir ostentosas u horteras para querer demostrar el estilo que tienen
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