Josep Font es ya uno de los cuatro españoles que han alcanzado la gloria en lo que al mundo de la moda se refiere.
Tan solo otros tres diseñadores españoles, Balenciaga, Pertegaz y Rabanne, forman parte del club de los selectos elegidos por la Federación francesa de la moda, entre los que se encuentran diseñadores de enorme trayectoria como Valentino o Galliano, para presentar una colección de alta costura en la semana de la moda de París. Este año han elegido a Josep Font tras quedar encantados con las dos colecciones anteriores de pret a porter que el diseñador español había presentado en la capital francesa.
Pero pese a su reciente triunfo, el catalán no es ningún recién llegado a esta industria. Así, a sus cuarenta y dos años puede presumir de tener un enorme éxito en Japón, cuenta con veintiseis tiendas propias, así como en Francia y en Gran Bretaña donde fabrica una línea de muebles bajo su sello. En España vende sus creaciones en más de sesenta puntos de venta, y en sus tiendas de Madrid, Barcelona y Bilbao.
Sus colecciones reflejan siempre una profunda reflexión, buscando expresar la esencia femenina a través de diseños que mezclan lo bello y lo poético con lo cómodo y lo sensual, estando pues destinados a una mujer moderna, libre y segura de sí misma, tal y como reconoce el propio diseñador.
Por eso durante su estreno parisino los espectadores pudieron ver reflejados en su colección tanto guiños a nuestro país como escenas cirquenses. El rojo se mezcló con el fucsia, el verde lima fue surcado por azabache, se vieron trabajados con materias orgánicas como flores, cortezas o insectos… es decir una colección muy Josep Font.
Pero, y aunque nos pese, no podremos comprar ninguno de los 16 diseños que el catalán exhibió en su estreno en una de las antiguas salas del Louvre, pues el objetivo de la colección no era mas que demostrar el talento del genio catalán.
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